En la búsqueda de leyendas e
historias que contar, me encontré con los vestigios de aquel continente llamado Gondwana.
Allí a la vera del camino y a pocos quilómetros de la ciudad de Trinidad en el
departamento de Flores, un enorme parque, con una sobresaliente mezcla de monte
indígena y especies exóticas, esconde rincones maravillosos, con formaciones
rocosas del tiempo en que los ríos corrían hacia el Norte de lo que hoy es
nuestro país. De eso hace ya más de 280
millones de años… pero la evidencia está esperándonos para mostrarnos que el
continente americano estuvo unido al africano; que lo que hoy son los
departamentos de: Flores, San José, Florida y Colonia, formaban parte de cadenas
montañosas, y que ríos veloces arrastraban rocas y arena conformando a lo
largo de miles de años obras geológicas, como la que pude ver.
Caminando junto al “Lagarto de Piedra”, como le llaman, sentí la inigualable sensación que solo la energía de la Tierra
puede trasmitir.