“La
educación es cuestión de vital importancia, para aquellos pueblos que, como el
nuestro, han adoptado la forma de gobierno democrático-republicana. La
extensión del sufragio a todos los ciudadanos exige una educación difundida a
todos: ya que sin ella el hombre no tiene la conciencia de sus actos”.
Entre
1867 y 1868 realizó un viaje a Europa donde visitó al poeta Víctor Hugo y luego
a Estados Unidos donde conoció y cultivó amistad con Sarmiento, compañero
además en el barco que los trajo de regreso. Semejante vínculo encendió la que
iba a ser para siempre su pasión, los temas de la enseñanza, comenzando desde
entonces una serie de investigaciones, trabajos y propuestas que más tarde
finalizarían en la implantación de la enseñanza obligatoria, laica y gratuita
por parte del Estado uruguayo.